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Productores conocieron situación actual de enfermedades y tienen nuevas herramientas para proteger sus cultivos de papa

Con éxito en convocatoria, en dos seminarios realizados en Los Lagos y La Araucanía, el Consorcio Papa Chile e INIA reunieron a agricultores y técnicos con el objetivo de difundir estrategias de defensa del patrimonio fitosanitario del sur del país, tras la detección de las temidas plagas cuarentenarias. La verdadera radiografía del cultivo, contó además con el apoyo del FIA, SAG y ODEPA.

Cerca de 250 productores de papas y técnicos del área, participaron en los dos seminarios que organizaron el Consorcio Papa Chile y el INIA, con el fin de dar a conocer la situación actual de las enfermedades que afectan al cultivo de la papa en el sur de país, y de paso, entregarles avances en el conocimiento de estos problemas y las herramientas para proteger este importante rubro, que engloba a cerca de 60 mil productores chilenos.

Captura de pantalla 2014-10-28 a la(s) 12.08.55Las actividades se desarrollaron recientemente en Puerto Octay, Región de Los Lagos y en INIA Carillanca, en la Región de la Araucanía, contando con el apoyo técnico de expositores del SAG, INIA y ODEPA. El financiamiento, en tanto, fue parte de los proyectos impulsados por la Fundación para la Innovación  Agraria, FIA.

Ivette Acuña, fitopatóloga de INIA y parte del grupo de coordinación de estos eventos, explica que “el objetivo de esta actividad fue dar a conocer los avances en investigación en los principales problemas sanitarios que afectan la zona sur hoy en día, es decir las enfermedades causadas por virus y las enfermedades cuarentenarias”.  En la primera, INIA con el apoyo del Consorcio Papa  y el SAG, están ejecutando un  proyecto, financiado por FIA, que ha permito la actualización del monitoreo de virus y sus vectores, conocer la situación y la importancia de estas enfermedades en la zona y con esto desarrollar una herramienta de apoyo a la toma de decisiones basada en información meteorológica. Acuña dijo que: “Esto último será un gran aporte al manejo eficiente y sustentable de este problema”.  Respecto a las enfermedades cuarentenarias, la investigadora de INIA enfatiza en el peligro que estas plagas constituyen para la zona productora de tubérculo semilla del país, “el enfoque hoy debe estar en la contención de estos problemas, o sea evitar que se diseminen a otros predios y zonas del área libre, para esto es necesario dar a conocer la importancia de estos problemas y que los agricultores sepan cómo prevenirlos”.

Otra de las expositoras, Mónica Gutiérrez, ingeniero agrónomo y fitopatóloga del SAG, en tanto, explicó que el mensaje en relación, tanto a las enfermedades cuarentenarias, como a los virus que se analizaron a través de las exposiciones, «es el cuidado clave que se debe tener frente a la semilla de papa, ya que muchas veces trae patógenos que son imposibles de detectar a simple vista. En esta línea, espero que a quienes participaron, tanto en Puerto Octay como en Carillanca, les haya quedo claro que si no parten con una semilla legal, llámese semilla certificada principalmente, que entrega garantías por análisis de laboratorios, no se podrá obtener un cultivo sanitariamente aceptable».

Fernando Torres, expositor de la situación actual de las plagas caurentenarias y encargado del programa nacional de sanidad de la papa del SAG, agregó que este año el SAG, en cuanto a vigilancia y fiscalización en papas, «ha intensificado el trabajo, producto de la aparición de las enfermedades cuarentenarias, lo que no necesariamente es suficiente para poder mantener a raya el problema, por lo que tenemos que apelar a la conciencia de la gente, y en eso también creo que el SAG ha dado pasos importantes, ya que se han hecho esfuerzos en términos de difusión en medios, folletería y charlas, mensajes que se han ido entregando a los participantes de la cadena productiva, con el fin de lograr mayor conciencia del cuidado del patrimonio fitosanitario».

Temas como el mercado de la papa, superficie actual de siembras a escala nacional, regional y una pincelada de lo que está sucediendo con el mercado internacional, también estuvo presente y fue analizado por Javiera Pefaur, de Odepa, quien a través del tema “Análisis de la comercialización de la papa en Chile”, se hizo presente en los dos eventos, tanto en la Región de Los Lagos, como en la Araucanía. «El mensaje claro hoy, es que el consumo de papas extranjeras procesadas está en franco aumento, lo que nos lleva a reflexionar sobre qué hacemos como productores locales, en qué nos enfocamos en el corto y mediano plazo, puesto que en este aspecto el producto de afuera está avanzando rápidamente. Hoy vemos que no estamos haciendo procesamiento en Chile, aún cuando existen capacidades y me parece que es una tarea pendiente entonces, dar valor agregado a la papa. En esta línea, como Odepa estamos reactivando mesas de trabajo público-privadas, con lo cual podríamos tener oportunidades de ver estos temas y otros que son vitales para el desarrollo de este cultivo».

La directora de INIA Carillanca, Ivette Seguel, por su parte, indicó que bajo su visión la jornada fue muy fructífera, «porque hay un avance importante en la entrega de información y el poner en común las investigaciones que realizan distintas entidades, entre otras INIA, en la lucha por mejorar el cultivo de la papa. El mensaje a través de estos eventos es claro: este cultivo tiene una enorme relevancia para el país, y por ello, es vital trabajarlo profesionalmente, independiente del tamaño del productor. Los riesgos que significan hacer un mal manejo, principalmente en el aspecto fitosanitario, son enormes y afectarían considerablemente al capital que hoy tiene el país, con una zona denominada libre de enfermedades cuarentenarias».

La ejecutiva explicó que «a nivel regional (Araucanía) somos la zona con mayor superficie de papas plantadas, y junto a ello, existen una gran cantidad de pequeños agricultores, en este contexto, es imprescindible que se mantengan informados de la situación que se vive en torno a la papa, y en estos masivos seminarios, se notó que existe el interés. Creo que ahora viene la misión de aplicar estos nuevos conocimientos por parte de los productores, porque me parece que con este tipo de actividades de abierta participación, el FIA, Odepa, Consorcio Papa, SAG y el INIA están cumpliendo con su labor de difundir y crear conciencia entre los actores de la cadena, pero está en cada uno de éstos, el lograr poner en práctica lo aprendido, trabajando como equipo, el sector público y el privado».

Las palabras de la directora de INIA en la Región de la Araucanía, encontraron eco en el productor del norte de Cañete, en la Región del Bio Bio, el presidente de la Asociación de Productores de Semillas de Papas de la comuna de Los Álamos (Aprosem), Darío Ibáñez, quien participó en el seminario realizado en Carillanca. «Me pareció un buen seminario y sinceramente quedo preocupado al ver la cantidad de virus y enfermedades que están afectando al cultivo en el sur del país, dejando ver la irresponsabilidad de los productores al no hacer uso de semilla certificada y legal, poniendo en riesgo nuestro patrimonio fitosanitario y la inversión de muchos, como nosotros, que trabajamos como semilleristas. Como Aprosem vemos con temor que se llegue, en algún minuto, a pensar en quitar la calidad de área libre, a la zona sur del país», indicó.

Fernando Contreras, ejecutivo FIA Zonal Sur, subrayó que es fundamental este tipo de instancias en donde se discute abiertamente sobre un cultivo tan relevante como la papa. «Creo que el Estado debiera hacer una mayor inversión también, y profundizar el trabajo de difusión de temas en torno a la papa, y todo lo que esta engloba, con el objetivo que estos casi 60 mil productores a nivel nacional, puedan avanzar acorde al tamaño de sus producciones y a su capacidad técnica. Frente a esto último, es clave que entidades como el Consorcio Papa, puedan articular fondos en los que se conjugan los aportes de instituciones públicas como FIA y Corfo, y traducirlos en investigación, mejoras de variedades, capacitación y transferencia en terreno».