INIA reforzará innovación en alimentos este 2015 frente a escasez hídrica
Con el objetivo de buscar nuevas alternativas productivas con la misma materia prima, el Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) desarrollará proyectos con foco en la generación de alimentos con valor agregado durante el 2015. En una ceremonia realizada en el Centro Experimental INIA Huasco, fueron presentados los proyectos FIC “Características de las propiedades funcionales de hortalizas frescas y deshidratadas mediante energía solar”, “Evaluación del uso alperujo como ingrediente de alimentación en ganado caprino” y “Obtención de hortalizas baby mediante sistemas productivos de bajo requerimiento hídrico”; iniciativas financiadas con fondos de innovación para la competitividad del Gobierno Regional de Atacama del año 2014.
Verónica Arancibia, Encargada del Centro Experimental Huasco, destacó estas iniciativas que darán nuevas posibilidades a los agricultores de la región. “se trata de proyectos pensados para entregar diferentes opciones a cientos de productores que hoy sufren con la falta de agua y, además, cumplimos con uno de nuestros lineamientos institucionales que es elaborar alimentos saludables a partir de la innovación”, afirma la Ingeniera en Alimentos de INIA.
Asimismo, el Director Nacional de INIA, Julio Kalazich, anunció que “el 2015 será el año de la Transferencia Tecnológica”, aludiendo a la importancia que el instituto dará a esta área para acercar la ciencia y la tecnología al campo atacameño. “Este año vamos a llegar con nuestra tecnología e información técnica a los territorios a través de 11 Programas y 35 Grupos de Transferencia Tecnológica (GTT) distribuidos en todo el país, beneficiando a miles de pequeños/as y medianos/as productores/as”, indicó la primera autoridad del INIA.
El programa de hortalizas deshidratadas promete diferenciar la producción con productos con altos índices nutricionales de acuerdo a las últimas tendencias del mercado. De esta manera, el ají cristal, tomate, zapallo italiano y berenjenas serán evaluados en condición deshidratada, para agregar valor a la producción hortícola. Con este sistema se potencia la calidad nutracéutica, a través de una mayor generación de antioxidantes, lo cual podría significar un incremento de precios gracias a la diferenciación de la producción.
Por su parte, el proyecto hortalizas baby permitirá al rubro hortalicero diversificar sus cultivos y aumentar sus utilidades, accediendo a nuevas variedades de hortalizas y tecnologías de producción, abriéndose a nuevos mercados y nichos que actualmente no se están abordando. La hidroponía permite intensificar la producción acotando a una menor superficie, modificando condiciones ambientales e incrementando la eficiencia del uso del agua próxima a un 100%.
En el caso del programa alperujo marcará un hito, dado que se trata de la primera iniciativa del INIA en Atacama junto al sector criancero. El proyecto solucionará en parte el problema de falta de alimentación para los caprinos al generar un nuevo alimento con alta disponibilidad en la región. El alperujo es un suplemento de la alimentación caprina con productos de desechos de la industria agroalimentaria lo que mitiga en parte la escasez de forraje en la región, siendo una alternativa de alimentación en estos momentos de sequía.