Especialistas del INIA proponen tecnologías y manejos para enfrentar los daños del cambio climático en la viticultura
Información relevante para la viticultura entregó grupo de cambio climático durante seminario que analizó las tendencias, proyecciones e impactos posibles del cambio climático en la agricultura.
La actividad fue encabezada por Emilio Ruz, Encargado de Relaciones Internacionales de INIA.
El cambio climático se ha convertido en una caja de sorpresas para la viticultura especialmente por la irrupción de fenómenos climáticos extremos como los vividos esta temporada en verano y recientemente en abril.
Precisamente para abordar estos temas se reunió en el Enjoy Santiago en Rinconada, Provincia de Los Andes, Región de Valparaíso, un grupo de especialistas de Chile y México para analizar los problemas, prevenir y buscar soluciones tecnológicas para mitigar los efectos del cambio climático.
A este seminario titulado Viticultura y cambio climático asistieron más de 80 personas, constituyendo la primera actividad del proyecto que forma parte de un convenio bilateral, financiado por el Fondo de Cooperación Chile-México titulado “Transferencia de conocimiento y tecnología para el cultivo de uva de mesa en México y Chile con énfasis a la mitigación y adaptación al cambio climático”.
“Hoy, se ven problemas que antes no se veían y hay que buscar tecnologías que permitan resguardarnos ante los cambios climáticos extremos que van desde la sequía, calor extremo o lluvias”, aseguró Carolina Salazar, Bióloga Ambiental Dr. coordinadora del seminario de viticultura y cambio climático.
¿Qué hacemos ante este fenómeno? se preguntó Pedro Izquierdo, Ing. Ag., asesor de vitivinicultura, “modificar los diseños de viñedos, modificar las prácticas de manejo, explorar nuevas zonas para explotación”. Aseguró el experto que “la falta de precipitaciones es grave, el calentamiento promedio es leve, las temperaturas altas aumentan, los eventos climáticos de heladas, intensidad de precipitaciones y ondas de calor podrían ser más intensos y sorpresivos”.
En materia de suelo y agua las soluciones posibles para enfrentar el cambio climático “son diseños prediales que capturen aguas lluvia, preparación de suelos en profundidad para mejorar capacidad de estanque, la eficiencia de uso del agua, riego subterráneo, mantención de capacidad de estanque, mantener porosidad mediante laboreo vertical, eliminar competencia, riego mecánico bien hecho, minimizar la compactación”.
Dr. Francisco Meza, profesor de la Facultad de Agronomía e Ingeniería Forestal y director del Centro de Cambio Global se refirió a la necesidad de realizar una agricultura inteligente y entendida como un agente transformador del medio ambiente y a su vez receptor de los cambios. “Un clima cambiante puede provocar cambios en la frecuencia, la intensidad, la extensión espacial, duración y temporalidad de fenómenos extremos meteorológicos y climáticos, y puede resultar en eventos meteorológicos y climáticos sin precedentes”.
El experto dio a conocer los ejes en los que se requiere centrar la atención: manejo de riesgos climáticos, aumento en la eficiencia de uso de agua, reducción de huellas ecológicas, aumento del stock de capital natural como la biodiversidad, suelos, reciclaje de nutrientes, selección y desarrollo de variedades.
Carolina Cruz Ing. Ag. presidenta de la asociación de asesores de uva de mesa, Uvanova, entregó un completo análisis de lo que pasó en la temporada reciente y que afectó directamente la uva de mesa. En su charla sobre el Impacto y efectos del Cambio Climático en las Uva de Mesa en Chile y estrategias de Mitigación planteó que las producciones de parrón de uva de mesa de exportación en la cuarta región no se sostienen con menos de 6.000 m3/ha.
Antonio Ibacache de INIA Intihuasi mostró los avances en el uso de portainjertos y el Dr. Claudio Balbontin se refirió a la tecnología de imágenes satelitales como una herramienta de apoyo en la mejoría de la gestión de los recursos hídricos.
También despertó interés el avance que mostró el Dr. Manuel Pinto en el manejo de la luz en el parrón. “La radiación solar es indudablemente el más importante de todos los elementos meteorológicos. Parte de la radiación solar que incide sobre una hoja o un racimo de la vid es absorbida, (A) otra parte es transmitida (T) y el resto es reflejado (R). La mayor parte de los mecanismos que operan para foto-proteger a las plantas contra el exceso de la radiación, también operarían en la vid.”
La Dra. Marisol Reyes de INIA Raihuén destacó con la entrega de datos de hace 20 o 30 años que permiten ver cómo ha evolucionado el cambio climático asociado a las fenologías del cultivo y ver cómo han ido cambiando. “Esta temporada la viticultura acusó de este cambio climático, siendo el rubro más complicado. Sin embargo, el INIA cuenta con datos de más de 30 años que hoy permiten hablar con base sólida acerca del cambio climático en el secano vitivinícola y sus efectos sobre vides viníferas”.
Este seminario entregó una completa visión acerca del cambio climático en la viticultura y sus efectos en la producción.
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